Cuerpo y X técnica mixta sobre papel 21,7 x 29 cm (1994)

Por aquel entonces tenía la costumbre de escribir un diario (de esos que nadie pueden leer excepto uno mismo) y para ocultar la identidad de las personas a las que hacía referencia, utilizaba la inicial de sus nombres en diferentes alfabetos, como por ejemplo en cirílico.

Empecé a desarrollar una fuerte conexión entre la pintura y la escritura y a establecer relaciones entre lo que vivía y lo que dibujaba. Hasta pensé que -por realizar esa actividad de manera consciente, podía estar transformando mi vida. A veces tan solitaria e introspectiva. (Aunque me parecía interesante y placentero).

Y a reflexionar, teorizar sobre la parte material -e inmaterial a su vez, del arte y los lenguajes artísticos: su componente simbólica. Por ejemplo: si en un libro vemos escrita la palabra <em>mar</em> se hace referencia a un elemento físico de proporciones gigantescas a través de tan sólo tres letras, que ocuparían alrededor de medio centímetro. Por otra parte: si retrocedemos 5000 años en la historia de la humanidad, en los monumentos megalíticos como las pirámides. Semejantes acumulaciones de piedra, venían a representar (simbolizar) la <em>muerte</em>, con lo que la relación entre lo material respecto a la inmaterial se invertiría.

Por ello tenía la necesidad de realizar estos dibujos, a veces de manera automática con lo que tuviera a mano, un papel y un lápiz medio roto. Sobre un periódico un una publicidad, en unas dimensiones donde lo material no fuese excesivo.

Cuerpo y A grafito sobre papel 21,7 x 29 cm (1994)

Sentado I rotulador sobre papel 21,7 x 29 cm (1994)